3.
 
EL POSTESADO 
 
Mediante esta técnica, se consigue que el acero de 
refuerzo (y por tanto, la estructura), entre en carga 
inmediatamente sin tener que producirse grandes 
deformaciones, las cuales agravarían aún más el estado 
patológico.
 
 
Los esfuerzos transmitidos al acero durante el tesado, se 
oponen a aquellos que están p
rovocando las 
deformaciones excesivas en el falso túnel.
 
 
El acero utilizado de tipo Dywidag de ?20 mm, alcanza su 
nivel de agotamiento a una tensión de aprox. 900 N/mm
2
, 
o lo que es equivalente cuando el esfuerzo aplicado es de 
aprox. 282 kN.
 
 
Se requiere una carga de postesado de entre 200-210 kN 
(aprox. 20-21 toneladas).
 
 
 
4.
 
SELECCIÓN DE LA RESINA DE ANCLAJE: 
 
Debido a la elevada densidad del armado existente, tanto 
en la sección original como en el murete ejecutado 
previamente, la dificultad de efectuar los taladros para los 
anclajes fue notoria, puesto que un taladro podría verse 
interrumpido por la obstaculización de las propias barras 
de acero existentes.
 
 
La utilización de corona de diamante (la cual es capaz de 
cortar acero), no estaba aconsejada debido a la frágil 
situación estructural.
 
 
Por ello, se optó por ir a diámetros de brocas, o de 
perforación, lo menores posibles, con el fin de optimizar el 
rendimiento en la puesta en obra y minimizar la afección 
estructural.
 
 
El nexo de unión entre estos requerimientos, fue la 
utilización de una resina de anclaje adecuada y que por 
tanto, cumpliera con los siguientes requisitos:
 
 
·
 
Elevada capacidad resistente: Dadas los elevados 
esfuerzos del postesado del acero (cercanos al límite 
elástico), la resina debe soportar tanto estos 
esfuerzos, como evitar la aparición de fenómenos 
derivados de la fluencia, ante cargas sostenidas en el 
tiempo.
 
·
 
Elevada capacidad adherente: Los esfuerzos son 
transmitidos al soporte exclusivamente por 
mecanismos adherentes (esfuerzos rasantes), 
·
 
Aplicación en pequeños espesores: Cuando mayor 
es el diámetro del taladro respecto de l
a barra de 
acero, menor es la tensión rasantes en la interfase 
soporte
-resina, al existir una mayor área que resiste 
las solicitaciones. Como se ha indicado, el 
condicionante básico de diseño fue perforar con un 
diámetro de broca lo menor posible para evit
ar dañar 
y/o cortar acero,  por lo que la resina debe soportar un 
elevado estado tensional.
 
·
 
Viabilidad de puesta en obra: Además, de todo lo 
anteriormente indicado, debe exigirse un completo y 
perfecto relleno en el interior del taladro (sección del 
túnel original) una vez efectuada la puesta en obra.  
 
Con todos estos requisitos, se optó por la utilización de: 
 
·
 
CONCRESIVE 4000
: Resina epoxi
-acrilato de 
consistencia pastosa para los anclajes de armadura 
postesada.
 
·
 
APOTEN ANCLAJES (MASTERFLOW 140) y 
MASTERFLOW 150
: Resina epoxi de consistencia 
fluida para los anclajes de armadura pasiva.
 
·
 
APOGEL (CONCRESIVE 1360)
: Resina epoxi muy 
fluida para la inyección de fisuras.
 
 
5.
 
LA PUESTA EN OBRA 
 
Los pasos seguidos en cuanto a la puesta en obra, fueron 
los siguientes: 
 
1. 
Repicado de las zonas fisuradas y roza externa en el 
murete existente para detectar y ubicar la primera 
línea del armado. De esta forma, se consiguen 
disminuir los riesgos de cortar o dañar el acero 
durante la perforación, así como de perforaciones 
fallidas.